
Vista desde el lomo del “Caballo de Troya”
Los cubos manifiestan en la curva, en las proporciones y el manejo del material la idea de velocidad y de la fluidez. Estos elementos rescatan el aspecto agresivo del caballo.
La escultura se arma su propio espacio, delimitando su lugar de acción en él, obligando al espectador a respetar los límites que ella impone.
Se resalta el carácter indomado del caballo.